No Es Tu Culpa, Pero esto no es Málaga
No te preocupes, no eres el primero ni serás el último. Llegar a Málaga con la ilusión de vivir una experiencia auténtica y terminar atrapado en las mismas trampas turísticas es casi un rito de iniciación.
No te preocupes, no eres el primero ni serás el último. Llegar a Málaga con la ilusión de vivir una experiencia auténtica y terminar atrapado en las mismas trampas turísticas es casi un rito de iniciación.
Si vienes a Málaga con la idea de tomarte una sangría en una terraza cara, sacarte la foto en Calle Larios y comerte una paella de color dudoso en un restaurante con camareros que te asaltan en la puerta… hazte un favor y lee esto antes de que sea demasiado tarde.
Si vives en Málaga, ya te lo sabes de memoria. Vas por el centro y ves a un guiri sudando la gota gorda en pleno agosto a las 3 de la tarde, con un vaso de sangría en una mano y una paella amarilla radiactiva en la otra.
Málaga es una ciudad espectacular, pero no todo lo que brilla es oro. Algunos lugares famosos son auténticas trampas turísticas que pueden arruinar tu experiencia (y tu bolsillo).